De abril 11 a abril 19, perdiendo nuestra independencia

Cada vez se torna mas irrelevante volver a examinar los acontecimientos que nos llevaron al 11 de abril de 2002. Sin embargo, ya que en apenas una semana también vamos a conmemorar la Independencia de Venezuela, es oportuno volver a examinar una vez más los eventos del 11 de abril para mostrar en que grado hemos perdido la libertad cuando llegamos al 19 de abril, 200 años después.

Muchos libros han sido publicados sobre los días cuando Chávez cayó brevemente hace 8 años. Y, sin embargo, todavía estamos lejos de conocer todo lo que deberíamos saber a estas alturas, como los nombres de quienes ordenaron la matanza. Como muestra tuvimos incluso un simulacro de juicio que condenó a algunas personas a 30 años de cárcel por los "crímenes" de abril de 2002 y sin embargo sólo los chavistas endurecidos aceptan el resultado de ese juicio. No es que los condenados sean inocentes o culpables, pero la forma en que el juicio fue llevado a cabo vuelve absolutamente claro que el gobierno había decidido fabricar un culpable, independientemente de la verdad.


Así que, ¿qué podemos decir hoy acerca de 11 de abril? Lo que sigue es simplemente mi opinión sobre algunos de estos eventos, tan válida como la de Chávez para el caso. Recordemos que el gobierno nunca pidió por una comisión de la verdad, e incluso bloqueó cualquier intento serio de nombrar una comisión. Que la oposición nunca lo hizo un punto clave de su plataforma política nos permite establecer que ambas partes tienen mucho que ocultar y que la comisión de la verdad hubiese sido fundamental para despejar el aire. Hoy poco podría lograr una comisión y si alguna vez fuese convocada lo mejor que lograría seria asignar responsabilidades políticas. No se puede esperar ahora que aparezca evidencia nueva fuera de un testigo sorpresa.

Seamos tajantes haciendo lista de lo que se puede decir hoy en día.

¿Qué llevó al 11 de abril?

De hecho sabemos con seguridad que algunos estaban conspirando contra Chávez y que Chávez estaba buscando una provocación que le permita purgar PDVSA y el ejército para poder comenzar su consolidación permanente en el poder. Chávez admitió lo propio en cuanto a la provocación y sabemos que los EE.UU. sabían del complot contra Chávez. Y, sin embargo, no podemos acusar a los EE.UU. de fomentar el golpe de estado que, al parecer, era demasiado crudo para que los EE.UU. todavía lo tomaran en serio. Pensándolo un poco, si los EE.UU. fuesen a tomar en serio cualquier complot en contra de cualquier gobierno de América así no mas, tendrían que crear una sub-Secretaría de estado sólo para eso.

Parece que los acontecimientos fueron más rápido de lo que ambos bandos esperaban; las reacciones desordenadas de ambos lados en la semana del 11 de abril son la mejor prueba, más allá de cualquier teoría conspirativa que queramos establecer para cada lado. Así que sí, es cierto que un grupo de personas estaban dispuestas a derrocar a Chávez de cualquier manera, pero también es cierto que el chavismo estaba ocupado ya en socavar la naturaleza democrática del sistema venezolano para garantizar un dominio permanente. La huelga de 2002-2003 es una prueba de lo primero, y las violaciones múltiples de la Constitución de 1998 por Chávez, haciendo que esta no valga mas que papel higiénico, son la prueba del segundo, aunque estas pruebas se produjesen después de abril de 2002.

Abril 11 a 13

Tanto se ha escrito que no hay ningún interés en recordar ese día. Vamos a limitarnos a algunos hechos importantes.

La marcha que fue enviada al palacio presidencial de Miraflores era de hecho una medida de presión para tratar de derrocar al gobierno.

Chávez respondió a esa marcha pidiendo la aplicación del Plan Ávila, que significaba que estaba listo para disparar a matar los desarmados civiles.

El Ejército se negó a seguirle en el posible baño de sangre.

Por lo tanto resulto un conflicto de poder que se podría resolver sólo a través de la dimisión del presidente o el despido de los jefes de Estado Mayor del Ejército.

Lo que fuese que sucedió a puertas cerradas, el comandante del Ejército, Lucas Rincón, anunció por televisión que Chávez había renunciado y por lo tanto se puso en marcha una carrera para reemplazar a Chávez.

Ya que los acontecimientos fueron mucho más rápido que lo que nadie estaba preparado, divisiones internas permitieron un vacío de poder en el que un aventurero ambicioso y políticamente mal preparado se coló e intentó hacer un breve golpe de estado que no duró siquiera 48 horas.

El golpe fracasó y el ejército que derrocó/ pidió-la-renuncia de Chávez decidió que era mejor restablecer Chávez en la presidencia.

Todo lo demás, desde los pistoleros de puente Llaguno hasta las supuestas masas que regresaron Chávez  al poder se utiliza para enturbiar con detalles seudo-épicos lo que realmente sucedió. Chávez pudo ser removido de su cargo SOLAMENTE porque el ejército lo decidió así y pudo ser devuelto a su cargo SÓLO porque el ejército lo decidió asá. Ni la plebe chavista ni la conspiración de la oposición tuvieron mucha influencia en todo el asunto cuando se mira objetivamente la forma en que este tipo de eventos tienen lugar en América Latina. El reciente  golpe/despido en Honduras es otro ejemplo clásico de nuestra "opción" militar latino americana.

Después de abril 2002

Lo que nos interesa más hoy son las consecuencias de ese fallido golpe de 2002.

El golpe, o lo que uno decida llamar el revuelo de abril, ha servido como cobertura para todos de los abusos del chavismo desde entonces. Incluso hoy en día, la respuesta estándar del chavismo es  "pero en el 2002 ...", como si 8 años no hubiesen transcurrido. Sorprendentemente el chavismo ha operado un sistemático auto lavado de cerebro que les permite con todo el aplomo posible comparar las 48 horas de Carmona, que nunca siquiera llego publicar un solo decreto en el Gaceta Oficial, como un abuso peor que los fraudes electorales acumulados, los presos políticos, las violaciones constitucionales, corrupciones, etc, que Chávez ha acumulado desde entonces. Deliberadamente o no, el chavismo ha perdido todo sentido de perspectiva, se ha radicalizado y ha desarrollado una paranoia política que nos acechará por generaciones, al mejor estilo peronista.

Chávez finalmente ganó la lucha política de 2002-2004, pero, incluso si la oposición no ha podido recuperarse, Chávez  no ha logrado ganar la guerra y aún hoy en día hay un atisbo de proceso político que podría poner fin a su régimen con un mínimo de sangre derramada. Él lo sabe, y de hecho él lo ha sabido desde abril de 2002 cuando se enteró de que la mayor parte de la sociedad venezolana al final rechazaría su naturaleza autoritaria. Si bien es cierto que pequeños grupos de personas exigían su retorno en el cargo el 13 de abril, también es cierto que Chávez nunca fue capaz de llamar a una manifestación de sus partidarios que iguale en número y entusiasmo la marcha que fue llamada en su contra el 11 de abril, independientemente de cuantas elecciones el haya ganado. Dolorosamente Chávez ha sabido que una gran parte de su apoyo es simplemente comprado, sobornado o algo similar, que aunque la ideología fuese el único factor, nunca crecerá más allá del 30% del núcleo duro, un número que hoy se pone en duda. No hay tal cosa como el hombre socialista del siglo XXI, sólo un grupo de oportunistas y anticuados comunistas reciclados que nunca entendieron la caída del Muro de Berlín.

Abril 2010

Y así llegamos a la conexión con el 19 de abril de 1810. La paradoja es que Chávez llega al inicio de la conmemoración de la epopeya de la independencia con un país de dudosa independencia.

Ya he escrito a menudo que Venezuela se ha convertido hoy en una colonia Castro-cubana. Importantes posiciones estratégicas en la administración pública de Venezuela están ahora en manos de los enviados cubanos, además de los miles de entrenadores deportivos y médicos de Barrio Adentro. Es constante el rumor de que todo el aparato de seguridad personal de Chávez es dirigido por cubanos y de personal cubano. De que nunca se puede acceder a ellos para demostrar lo contrario es la mejor prueba. En los últimos meses Chávez incluso ha dejado de viajar en el avión presidencial venezolano, prefiriendo los de Cubana de Aviación.

Usted puede llamar esto el comienzo de una federación entre Venezuela y Cuba o una colonización pura y simple, como prefiero llamarlo, pero sospecho que los cubanos tienen el mayor desprecio para los venezolanos. ¿Por qué no habrían de tenerlo? De un lado ven la abyecta sumisión del grupo chavista, que permite libremente ser maltratados por sus superiores cubanos. Del otro lado ven una fuerza de oposición que no logra denunciar contundentemente lo que esta sucediendo, incapaz de elevarse por encima de intereses mezquinos para recuperar la independencia de Venezuela. ¿Por qué los jefes cubanos serian diferente en su desprecio de otros amos coloniales?

Pero incluso si por arte de magia nos fuéramos a quitar el peso cubano de encima, ¿que independencia le queda a Venezuela? ¿Está PDVSA en condiciones de financiar por sí sola las grandes inversiones que las corporaciones petroleras requieren hoy en día? ¿Cómo se puede compensar el hecho de que ahora importamos hasta un 70% de nuestros alimentos, cuando llegamos a ser auto-suficientes, o al menos equilibrar nuestras importaciones con algunas exportaciones de alimentos no hace tanto tiempo? Actualmente, el café, la fuente de nuestra riqueza en el siglo XIX es uno de los muchos artículos que se deben importar ...

A medida que llegamos al lunes 19 de abril es hora de que nos preguntemos que tan independientes somos como país, y en nuestra vida privada, cada vez más amenazados por un régimen represivo neo-colonial.

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Traducido y adaptado del original en inglés por el autor.